En un contexto de tarifazos que atraviesa el país, a partir del 1° de abril, los conductores argentinos deberán enfrentar un nuevo aumento en el precio de la nafta, como consecuencia de la actualización de impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC) implementada por el gobierno de Javier Milei. Este incremento, del 4,5%, se verá reflejado en los surtidores de todo el país.
Según estimaciones del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el precio por litro de nafta súper en YPF llegará a $836, mientras que la premium costará $1031 en la Ciudad de Buenos Aires (CABA). Esto implica un aumento de $36 en el caso de la nafta súper y de $21,92 en el gasoil, lo que representa un incremento del 4,5% y 2,6% respectivamente, sobre los valores actuales.
Este ajuste en el precio de los combustibles, que se ha dado varias veces en el último tiempo, impactará directamente en el bolsillo de los argentinos, quienes deberán adaptarse a estos nuevos costos. Actualmente, y con estos precios, cargar un tanque de 40 litros con nafta súper en la Ciudad de Buenos Aires costaría $33.440.
Para amortiguar el impacto de estos aumentos, se ofrecen descuentos de hasta el 50% para cargar nafta y gasoil en diferentes estaciones de servicio. Por ejemplo, en YPF con Serviclub hay 15% de descuento en nafta y diésel Infinia, con un tope de $3.000 por semana, entre otros beneficios. Shell, Puma, y diversas entidades bancarias también ofrecen promociones para aliviar el gasto en combustible de los argentinos.
