La semana pasada se viralizó la novedad respecto del supuesto valor de un grupo de monedas de $1 que han sido acuñadas en el Reino Unido en el año 1995 para la República Argentina. Tras ello, muchos ha comenzado a ponerle atención a este pasatiempo que reúne muchos adeptos a nivel global: la numismática.
Esas monedas tenían un error particular ya que en la zona del acuñamiento en lugar de “provincias” se muestra la leyenda “provingias”. A pesar de que circularon publicaciones en la plataforma Mercado Libre donde se llegaba a pagar hasta $15.000 por cada moneda de ese tipo luego se confirmó que no eran tan valiosas, puesto que salieron al mercado 56 millones.
No obstante, este tipo de errores que se encuentran en monedas y también en billetes son muy rebuscados por los coleccionistas en distintos grupos de Facebook u otras plataformas sociales.
Entre los billetes, los más valorados son los que poseen algún tipo de error de impresión o de ortografía. Aunque para saber su cotización real hay que encontrar algún comprador interesado o dispuesto a pagar más por ese billete, que no siempre es sencillo.
El especialista en temas referentes a la numismática, Ariel Dabbah —miembro titular del Instituto Federal de Investigadores Numismáticos (Ifinra) y autor del libro “Errores de acuñación en la amonedación nacional 1881-2015″— citó algunos ejemplos de billetes con errores que están actualmente en circulación. “Son muy coleccionables”, destacó a Infobae.
Este sería el caso del billete de $1.000, de la serie de animales, que en su reverso no tienen completo el dibujo, solo se ve el fondo sin terminar y falta el mapa de la Argentina en color rojo y el árbol con el nido del hornero en color violeta.
En la plataforma de Mercado Libre, por caso, venden uno de ellos de $1.000 por 20.000 pesos.
El motivo es que no tiene impresa su banda de seguridad. Es un error de acuñación importante: este hilo impreso en líneas intercaladas en tonos tornasolados y un diseño especial es uno de los principales elementos de seguridad del billete porque es muy difícil de falsificar.
“El billete parece bueno, pero eso es algo difícil de determinar sin tenerlo en la mano. Y si se desata furor seguro van a aparecer falsos. Hay que tener cuidado”, advierte el especialista a ese portal.
También hay un billete de $200, de la serie de animales, que en su frente (anverso) no tiene impreso el numero 200 ni las palabras “doscientos pesos” que en el billete habitual se leen en una tinta de color verde que cambia al dorado (conocida como tinta de variabilidad óptica).
Otro caso es el billete de $200 que tampoco tiene terminado el dibujo de su reverso. En ese billete, no también falta el mapa y gran parte del dibujo que en los billetes correctamente impresos tiene colores rosas sobre un fondo celeste.
