El Big Bang es ampliamente aceptado como el comienzo de todo lo que vemos a nuestro alrededor.

Pero un nuevo estudio sugiere que el principio del fin podría llegar ‘notablemente’ pronto, cuando los 13.800 millones de años de expansión del universo se detengan abruptamente.

Los investigadores creen que podría entrar en una era de contracción lenta que terminará dentro de miles de millones de años con la muerte, o posiblemente el renacimiento, del tiempo y el espacio.

En un nuevo artículo, los científicos de la Universidad de Princeton utilizaron observaciones previas de la expansión cósmica para tratar de modelar la energía oscura, una fuerza misteriosa que constituye alrededor del 70 por ciento del universo.

La fuerza repelente parece estar causando que el cosmos se expanda cada vez más rápido, pero los expertos creen que su influencia ahora puede estar debilitándose.

Según su modelo, la aceleración del universo podría terminar rápidamente dentro de los próximos 65 millones de años; luego, dentro de 100 millones de años, el universo podría dejar de expandirse por completo y comenzar a contraerse.

Esto provocaría un ‘gran crujido’ y todo podría suceder ‘notablemente’ rápido, según el coautor del estudio Paul Steinhardt, director del Centro de Ciencias Teóricas de Princeton en la Universidad de Princeton en Nueva Jersey.

El Big Bang es ampliamente aceptado como el comienzo de todo lo que vemos a nuestro alrededor. Pero un nuevo estudio sugiere que el principio del fin podría llegar ‘notablemente’ pronto, cuando los 13.800 millones de años de expansión del universo se detengan abruptamente (imagen de archivo)

¿CÓMO ACABARÁ EL UNIVERSO?

El gran crujido:

La gravedad se convertiría en la fuerza más poderosa del universo. La tasa de expansión del universo disminuiría y el universo comenzaría a colapsar.

El gran rebote:

El universo podría encogerse lo suficiente como para volver a un estado similar a sus condiciones originales. Entonces podría ocurrir otro Big Bang, también conocido como ‘Big Bounce’, que crearía un nuevo universo a partir del anterior. Este el patrón cíclico de expansión y contracción colapsaría constantemente y reharía el universo.

La gran helada:

En este escenario del fin del universo, la materia permanecería unida, pero se desintegraría en radiación a medida que el universo se expande.

El gran desgarro:

Esto comenzaría una vez que la atracción de la expansión del universo sea más fuerte que la gravedad. Las galaxias se desgarrarían, seguidas de los agujeros negros, los planetas y las estrellas.

‘Retrocediendo en el tiempo 65 millones de años, fue cuando el asteroide Chicxulub golpeó la Tierra y eliminó a los dinosaurios’, dijo. Ciencia viva.

‘En una escala cósmica, 65 millones de años es notablemente corto.’

Albert Einstein tuvo la idea de la constante cosmológica, que es el valor de la densidad de energía uniforme que impregna el espacio, para explicar por qué el universo no colapsaba.

Pero la cosmología experimentó un cambio de paradigma en 1998 cuando los investigadores anunciaron que la velocidad a la que se expandía el universo se había acelerado.

Como resultado, a la constante cosmológica se le tuvo que dar un valor distinto de cero, y muchos creyeron que esta expansión era la señal de un colapso inminente.

Los científicos nombraron la misteriosa fuente de esta aceleración como energía oscura.

Una entidad invisible, creen que funciona en contra de la gravedad al separar los objetos más masivos del universo en lugar de unirlos.

Eso significa que si se vuelve más débil, la gravedad sería la fuerza dominante y haría que el universo se encogiera, lo que provocaría la colisión de estrellas, galaxias y planetas a medida que el cosmos colapsa sobre sí mismo.

Los expertos creen que podría debilitarse porque, en lugar de ser constante, la energía oscura puede ser algo llamado quintaesencia, un campo dinámico que cambia con el tiempo.

Para probar su teoría, los investigadores creó un modelo de quintaesencia, mostrando su poder repelente y atractivo a lo largo del tiempo.

Una vez que el modelo reprodujo de manera confiable la historia de expansión del universo, extendieron las predicciones hacia el futuro.

Lo que encontraron fue que la energía oscura podría estar en medio de un rápido declive que potencialmente comenzó hace miles de millones de años, lo que significa que la expansión acelerada del universo ya se está desacelerando.

En un nuevo artículo, los científicos de la Universidad de Princeton utilizaron observaciones previas de la expansión cósmica para tratar de modelar la energía oscura, una fuerza misteriosa que constituye alrededor del 70 por ciento del universo (imagen de archivo)

En un nuevo artículo, los científicos de la Universidad de Princeton utilizaron observaciones previas de la expansión cósmica para tratar de modelar la energía oscura, una fuerza misteriosa que constituye alrededor del 70 por ciento del universo (imagen de archivo)

«Este sería un tipo muy especial de contracción que llamamos contracción lenta», dijo Steinhardt. «En lugar de expandirse, el espacio se contrae muy, muy lentamente».

Los expertos dijeron que, para empezar, este encogimiento del cosmos sería tan lento que si los humanos todavía estuvieran vivos en la Tierra en ese momento, ni siquiera lo notarían.

Pero después de unos miles de millones de años, el universo alcanzar aproximadamente la mitad del tamaño que tiene hoy.

Steinhardt dijo que desde ese punto el cosmos se contraería hasta que se derrumbe sobre sí mismo en un ‘Big Crunch’, o se encoja lo suficiente como para volver a un estado similar a sus condiciones originales.

Él teoriza que podría ocurrir otro Big Bang, también conocido como ‘Big Bounce’, que crearía un nuevo universo a partir del anterior.

Qué te pareció esta nota?
Me Gusta
Me Gusta Me Encanta Me Divierte Me Sorprende Me Entristece Me Enfada

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí