El miércoles tuvo lugar la reunión de labor parlamentaria para abordar el DNU del Gobierno, confirmando el debate para el jueves en la sesión del Senado. Esto ocurre después del anuncio de Javier Milei que objeta el debate “apresurado” del mismo, permitido por la vicepresidenta Victoria Villarruel.
El Decreto de Necesidad y Urgencia tuvo numerosos amparos en contra como el de la CGT, que suspendió la reforma laboral que se incluía.
El análisis del DNU está programado para la sesión del jueves a partir de las 11 horas. Es crucial señalar que para que el Decreto de Necesidad y Urgencia sea revocado, debe ser rechazado por ambas cámaras del Congreso.
Es decir, si el decreto es rechazado solo por la mayoría de los senadores, seguirá en vigencia, aunque sujeta a la votación en la Cámara baja.
Hoy, la Oficina del Presidente emitió un comunicado expresando su preocupación por la decisión unilateral de algunos sectores políticos de avanzar con una agenda propia, lo que obstaculizaría las negociaciones y el diálogo entre los distintos sectores políticos.
El comunicado critica tanto el tratamiento apresurado del DNU 70/23 como la iniciativa de promover una fórmula jubilatoria sin consenso, lo que violaría el espíritu de acuerdo promovido por el Presidente en su convocatoria al Pacto de Mayo.
Fuentes legislativas confirmaron el martes pasado la decisión de la vicepresidenta y titular del Senado de incluir el DNU, asumiendo el riesgo de una votación incierta, ya que no se garantiza una mayoría para confirmar el decreto.