En una iniciativa para reactivar la economía, el gobierno liderado por Javier Milei tiene previsto relanzar el programa “Ahora 12” a principios del próximo año. Con el actual plan próximo a expirar el 31 de enero, el ejecutivo busca un empalme fluido hacia la nueva propuesta, para lo cual ya se iniciaron conversaciones entre el Banco Central y entidades bancarias.
Negociaciones en marcha
Las negociaciones abiertas con los bancos se centran en analizar el nuevo esquema de costos y determinar la distribución de la carga financiera entre las instituciones financieras, el Estado y los comercios participantes. La secretaría de Comercio, a su vez, lidera las negociaciones directas con las cadenas comerciales.
Claves del “nuevo Ahora 12”
Los técnicos de la secretaría no solo están abordando las pautas financieras del nuevo plan, sino que también están evaluando distintos nombres para reemplazar el actual “Ahora 12”. La principal intención del gobierno es lograr una disminución significativa de la tasa de interés, la cual alcanzaba el 71,5% de tasa nominal anual hasta noviembre.
El objetivo es reducir este costo de manera sensible, en consonancia con las últimas medidas del Banco Central. Con 6,4 millones de operaciones registradas en el último mes, el gobierno planea no solo mantener las 12 cuotas con tasa preferencial sino también introducir promociones con 6 cuotas “sin interés”.
Ampliación de productos incluidos
Bajo la premisa de incentivar la actividad económica durante el actual ciclo recesivo, el “nuevo Ahora 12” abrirá las puertas a una mejora en las ventas, según indican fuentes oficiales. Ante la previsión de una caída en las ventas, se espera que los rubros de línea blanca y pequeños electrodomésticos se beneficien con las seis cuotas sin interés.
Además, se contempla la inclusión de otros productos como bicicletas, motos de baja cilindrada y televisores en el relanzamiento del programa. Las conversaciones entre la Secretaría de Comercio y el Banco Central con las cadenas comerciales y bancos continúan, buscando acordar el reparto de las cargas financieras entre el Estado y el sector privado.