El Gobierno de Javier Milei tomó la determinación de eliminar los subsidios al gas natural para hogares de altos ingresos y otros usuarios no domiciliarios, a partir del próximo 1 de abril. Esta medida, que entrará en vigor en los próximos días, tendrá un impacto significativo en los bolsillos de los consumidores.
La definición oficial de esta medida, que inicialmente estaba prevista para febrero, se anunció con cierto retraso. El ministro de Economía, Luis Caputo, decidió posponerla con el objetivo de intentar controlar la inflación. Esta acción se enmarca en el esfuerzo del Gobierno por mantener el superávit fiscal en 2024, con la reducción de subsidios energéticos como uno de los puntos clave.
La resolución 41/2024 de Energía establece los nuevos precios mayoristas del gas, como parte del mix de abastecimiento de producción local e importaciones. Se espera que estos aumentos se trasladen a diferentes segmentos de usuarios, aunque aún no está claro cómo se implementará. Energía tiene previsto implementar un nuevo esquema de subsidios que incluirá una Canasta Básica Energética (CBE) adaptada a las diferentes zonas climáticas del país.
Los hogares de Nivel 1 (N1) y los usuarios “Servicio General P” serán los más afectados por este incremento, viendo casi triplicado el precio del gas que venían pagando. Por otro lado, los usuarios N2 y N3 también experimentarán aumentos significativos en el costo del servicio. Esta medida impactará directamente en el presupuesto de los hogares y generará preocupación en diversos sectores de la sociedad.
