El recorte presupuestario en partidas provenientes de Buenos Aires generó un impacto significativo en Jujuy, donde diversas obras públicas y proyectos han sido paralizados o cancelados, según denuncian varios intendentes y gobernadores. Uno de los casos más emblemáticos es la interrupción de la semaforización en Palpalá.
Referentes locales de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), como Ramón Neyra, expresaron la gravedad de la situación en una frase: “tenemos que sobrevivir”. Estas palabras resumen el impacto directo que los recortes presupuestarios están teniendo en el sector.
Corina Velardes, referente de la Cooperativa de Trabajo “Diego Armando Maradona”, destacó la importancia de las obras que se han detenido. Mencionó proyectos que beneficiaron a más de 200 familias en barrios de Alto Comedero, donde se mejoró significativamente la calidad de vida. Sin embargo, lamentó la cancelación de la obra de un centro comunitario que incluía un comedor y apoyo escolar para niños y adolescentes locales.
La situación se agrava aún más debido a la crisis sanitaria, especialmente con el aumento de casos de dengue. Velardes señaló a Jujuy Al Momento que solo el 1% de la población tiene acceso a una red cloacal adecuada, lo que resalta la urgencia de mantener y completar las obras públicas.
El reclamo de la comunidad no se limita al beneficio directo que brindan estas obras a los sectores más vulnerables, sino también al derecho fundamental al trabajo. Existe una solicitud urgente de continuidad en las obras y un llamado a la responsabilidad por parte del gobierno nacional para cumplir con los compromisos adquiridos.














