Según los datos del relevamiento semanal de la consultora LCG, los precios de los alimentos registraron una suba del 0,6% durante la última semana de junio, marcando una desaceleración de 0,3 puntos porcentuales en comparación con los siete días previos. En el conjunto del mes, el valor de la canasta de productos básicos se incrementó un 3,8%, siendo las carnes y los lácteos las categorías que más contribuyeron a esta variación mensual.
El INDEC publicará el dato oficial de inflación el próximo 12 de julio, pero los datos preliminares de LCG indican que junio cerró con una inflación de alimentos superior a la de abril y mayo, meses en los que la inflación fue del 2,3% en las últimas cuatro semanas de cada mes. En detalle, los alimentos tuvieron un incremento promedio del 3,8% en las últimas cuatro semanas y del 3,1% de punta a punta en el mismo período.
Productos con mayores aumentos en junio
De acuerdo con LCG, los lácteos y los huevos encabezaron la lista de productos que más subieron, con un incremento del 7,5%. Le siguieron los aceites con un 5,7%, las carnes con un 5,4%, y el azúcar con un 3,8%. Las verduras aumentaron un 2,3%, mientras que el pan, cereales y pastas subieron un 2,1%. Las bebidas e infusiones registraron un aumento del 2%, y los condimentos y otros productos alimenticios del 1,9%. Las comidas listas para llevar subieron un 1,8%, y las frutas fueron la única categoría que mostró una baja, con un -2%.
Comportamiento de precios en la última semana
En la última semana de junio, se observó una caída de precios en cuatro de las diez categorías relevadas, incluyendo las bebidas, el azúcar y las frutas. El rubro que registró el mayor retroceso fue el de las verduras, con una baja del -2,9%.
De esta manera, la inflación semanal en la canasta de productos básicos cerró en un 0,6%. El aumento en los precios de los lácteos y las carnes fue compensado por la caída de las frutas y verduras, que restaron 27 puntos porcentuales de la inflación semanal, según el informe de LCG.
Este comportamiento demuestra cómo la dinámica de ciertos productos puede influir significativamente en la inflación general de los alimentos, afectando el poder adquisitivo de los consumidores.