En medio de la pandemia del coronavirus, una conmovedora historia tuvo lugar el último fin de semana en la provincia de Río Negro. Una mujer pagó un taxi para que le trajeran a su perro, que estaba a 450 kilómetros de distancia.
El animal viajó hasta la ciudad de Cipolletti desde la ciudad de San Antonio Oeste, donde el municipio montó un puesto de control por el “operativo cerrojo” que prohíbe el ingreso de visitantes, entre otras medidas dispuestas para evitar la propagación del Covid-19.
El episodio quedó registrado en una grabación que filmó el delegado municipal de Las Grutas, Nicolás Carassale, quien intervino en las tareas de inspección del tránsito vehicular.
El funcionario confesó que este caso los sorprendió, aunque subrayó que se suma a la enorme cantidad de “anécdotas de las cosas que pasan en el control”.
Las imágenes, que se volvieron virales, muestran el momento en que la mujer se acerca a un taxi blanco y recibe a su mascota -que pareciera ser un ovejero alemán- a la cual abraza fuertemente contra su pecho. De fondo, se escuchan los comentarios de Carassale.
Según trascendió, una conocida base de taxis de Cipolletti y un conductor de San Antonio Oeste revelaron que el costo del trayecto oscila entre unos 25 mil y los 30 mil pesos.
El operativo se tuvo que realizar de esta manera ya que la costera no permite el ingreso, es decir, la mujer no podía ir allí con un vehículo particular. No obstante, cabe mencionar que las estrictas medidas hicieron que -hasta el momento- ambas ciudades no registren casos de Covid-19.