Los eventos sociales se encuentran prohibidos debido al contexto de la pandemia que azota el país y el mundo. Sin embargo, a pesar de esa prohibición las fiestas continúan realizándose en la clandestinidad. Es el caso de un hecho ocurrido en el barrio Alto Comedero de San Salvador de Jujuy.
Un llamado telefónico alertó a efectivos policiales sobre una fiesta clandestina que se llevaba a cabo en un domicilio ubicado sobre calle Sausalitos del Sector B3 del populoso barrio antes mencionado. El domicilio se hallaba acondicionado como local bailable y habría estado en funcionamiento durante toda la noche.
Frente a este panorama es que acuden al sitio los agentes de la Seccional N° 56 y al llegar constataron lo denunciado. Había más de 70 personas que cantaban y bailaban e ingerían bebidas alcohólicas de forma desenfrenada y sin respetar ningún tipo de protocolo.
Al advertir la presencia policial, los fiesteros comenzaron a escapar por los techos de las viviendas. En medio de la persecución de un grupo de personas un efectivo fue empujado al Arroyo Las Martas y al caer se le incrustó una botella de vidrio en una de sus piernas.
Finalmente, lograron la detención de 23 personas de las cuales siete eran menores de edad. Estos últimos, horas más tarde fueron entregados a sus padres, de acuerdo a lo dispuesto por el Juzgado de menores.
