El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, remitió al parlamento provincial la Ley Impositiva Fiscal para el año 2024, que contempla un significativo ajuste en el costo del impuesto inmobiliario. Según el proyecto, se esperan incrementos para los contribuyentes que oscilan entre el 140% y el 300%.
El proyecto establece topes progresivos de crecimiento del impuesto inmobiliario en relación con el año anterior, siendo este crecimiento ascendente a mayor patrimonio. Se estima que el 90% de los contribuyentes experimentará aumentos iguales o menores al 200%, mientras que el 10% restante enfrentará subas del orden del 300%. Estos valores entrarán en vigencia a partir del 1° de enero del próximo año.
Para el impuesto inmobiliario urbano edificado, la escala de base imponible varía desde 0 hasta 1,8 millones de pesos, con una cuota fija de $1.820. En comparación con el año anterior, la escala más baja tenía un límite de $456.000 y una cuota fija de $455. En el extremo superior, la nueva escala comienza a partir de los $152 millones de pesos, con un costo fijo de 2,8 millones de pesos.
El impuesto a pagar tendrá topes de incremento en 2024 en comparación con este año, siguiendo variables específicas, como el 140% para inmuebles con una base imponible hasta $5.054.912, el 170% para inmuebles entre $5.054.912 y $9.310.820, el 240% para inmuebles entre $9.310.820 y $31.465.000, y el 300% para inmuebles entre $31.465.000 y $121.800.000.
En cuanto al impuesto automotor (patentes), se prevé un incremento promedio del 145% para los vehículos modelos 2013 a 2024, con un tope máximo de aumento del 270% para los autos de gama alta.
El gobernador Kicillof busca la aprobación de este proyecto junto con un pedido de endeudamiento por el equivalente en pesos de USD 1.800 millones. Se espera que la Legislatura apruebe estas medidas esta semana, buscando dotar de mayor progresividad a la estructura tributaria y atendiendo la realidad de las pymes en la provincia de Buenos Aires.