Una mujer de la provincia china de Hebei pagó con monedas un coche que costaba 190.000 yuanes, unos 27.400 dólares.
La compradora llegó a un concesionario de automóviles con 66 sacos que pesaban en total más de una tonelada, para adquirir un Volkswagen Passat. Dio 131.492 yuanes, cinco jiao y un jiao, y los restantes 58.508 yuanes los pagó mediante un servicio de transferencias.
Chinese woman buys a £21,000 Volkswagen with 66 bags of COINS https://t.co/oL5KnVLz5U
— Daily Mail Online (@MailOnline) 22 de mayo de 2019
El dinero tuvieron que contarlodurante tres días 17 empleados, que las guardaron en varias cajas separadas para después enviarlas al banco. A causa del continuo contacto con el metal, a uno de los trabajadores se le volvieron negras las manos.
La compradora explicó que regenta un pequeño restaurante de comida rápida y que acumuló durante 10 años el dinero que recibía de sus clientes.